Asida al carrito -los nudillos blancos, el corazón encabritado, la boca seca-, ella se acerca con piernas de plomo a la caja rápida. No morirás ahora, repite como mantra.
A la salida, el acompañante terapéutico la felicitará. Hoy ha logrado realizar la mitad de la compra.
Mención - Febrero 2011- La Marina. Juez: Isai Moreno
Micro de subsistencia pura y dura. Me gustó mucho.
ResponderEliminarBesos madrugadores.
Es que hay veces que ir a la compra es peor que ir al dentista ¿eh?
ResponderEliminarAbrazos ;)
Excelente Mónica! Muy bien reflejada la fobia, el DOC... y con final feliz!
ResponderEliminarAbrazos,
Así es, Lola, y me alegra mucho que te gustara.
ResponderEliminarPues, yo preferiría la compra al dentista, todas las veces, Maite, jeje.
Gracias, Claudia. Un final feliz es necesario en estos casos.
Muchas gracias por leer y comentar, chicas.
Tremendo.
ResponderEliminarMuy intenso micro.
Besos, Mónica.
Perfecto Mónica!!!
ResponderEliminarLo sé porque tengo un ser querido que padece la fobia que retrataste.
Tu personaje va mejorando, que no es poco.
Besos!
Breve, conciso, impecable, impactante, me gustó muchísimo.
ResponderEliminarJ&R
Muy bueno, Mónica. Un vistazo atroz al abismo de la debilidad humana. La prosa desnuda y directa va muy bien con este tema descarnado.
ResponderEliminarAbrazos fuertes,
PABLO GONZ
hoy intente hacer uno yo, pero como los tuyos no hay, con final feliz y todo
ResponderEliminarTorcuato, Patricia, Palabras..., Pablo y Ale, muchas gracias por pasar y dejar su comentario.
ResponderEliminarAbrazos fuertes para todos.
Muy bien escrito y reflejada esa angustia que consigues transmitir a la perfección.
ResponderEliminarEnhorabuena, Mónica, sabía que era tu nick e imaginaba que era este micro el premiado.
ResponderEliminarÚltimamente la Marina bulle en cantidad y calidad, así que la menciones tienen más mérito.
Un beso.