Subo fatigosamente la escalera de piedra cuando un hombre en jubón, calzas y arco en mano se adelanta y llega antes que yo a la almena de la torre. Desde allí, al parecer, reconoce al enemigo que se acerca; entonces, carga y tensa la cuerda: la certeza puesta en el rival.
-¡Qué ridiculez! ¿Cómo puedo soñar esto? -exclamo al tiempo que él suelta la flecha. Sin duda, le he hecho errar el tiro pues, furioso, carga otra vez y me apunta a mí.
Así fue como desperté con esta terrible punzada en el ojo izquierdo, doctor.
Fantasía y humor. Buen micro, Mónica.
ResponderEliminarMe gusta la vivacidad de este micro, Mónica. Tus palabras recorren la acciones sin detenciones innecesarias. Eso me parece esencial en este género.
ResponderEliminarAbrazos,
PABLO GONZ
Elisa: el buen humor nos hace bien, gracias por pasar.
ResponderEliminarPablo: ¡Bienvenido a mi casa! Las minificciones no son mi fuerte, pero intento mejorar. Gracias por tus palabras.
Abrazos fuertes a los dos.
Me gusta la mezcla entre sueño y realidad, Mónica. La fantasí ante todo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy buena mini, Mónica; me ha hecho recordar (y disculpa que sea autorreferencial), con otro tinte, una mini que me dio muchas satisfacciones Despertares, quizá ya la hayas leído.
ResponderEliminarEn otro orden de cosas, creo que te manejás muy bien en el terreno del microrrelato (lo digo por tu comentario a Pablo).
Saludos.
José Manuel, muchas gracias. Sí, generalmente me voy hacia lo fantástico en mis cuentos, me gusta el género.
ResponderEliminarGabriel: Sí, con otro tono, pero tenés razón. Despertares es muy conmovedora, te lo debo haber dicho en su momento.
Bueno, gracias por lo último, el caso es que no tengo tantas ideas ni producción de minis. Tiendo más a los cuentos, que obviamente no subo al blog porque no se leen cosas extensas en Internet. Mis minis -las que valen la pena-siempre son de inspiración súbita: a veces es la idea; otras, la idea y las frases como dictadas. Creo que la elaboración de minis conlleva un adiestramiento mental que hace prevalecer la síntesis y que en cierta manera 'moldea' la manera de pensar del autor y su consecuente desarrollo narrativo, lo condiciona. Para quien busca dedicarse al microrrelato, la adquisición de esa habilidad es algo positivo. Pero no es mi caso: prefiero escritos de largo aliento, desarollar tramas, ahora, cuando me asalta una buena idea para mini, pues trato de no desaprovecharla.
Gracias a los dos por leer y comentar. Un abrazo fuerte.